Ya a inicios de este mes la prestigiosa revista National Geographic Traveler, había destacado al destino de la región de Los Lagos, como uno de los diez mejores lugares para visitar en el invierno Boreal del 2016.

La revista de viaje “Travel + Leisure”, una de las más importante de la industria turística, incluyó a Chiloé en un listado de los 50 mejores lugares del mundo para recorrer el 2016.

La publicación de origen estadounidense alabó a la isla por su particular cultura e identidad, señalando como atractivos primordiales sus palafitos y las iglesias que son Patrimonio Cultural de la Humanidad según la UNESCO. Al mismo tiempo, el texto consideró los parques, su naturaleza y la observación de fauna como pingüinos y ballenas.

Cabe señalar que Chiloé comparte el ranking con destinos mundiales como: Isla Galapagos, La Habana, Costa Rica, Siberia, Sicilia, Tazmania, Borneo, Rio de Janeiro, Tipei, entre otros lugares.

En este sentido, la directora Sernatur Los Lagos, Claudia Díaz, dijo que esta noticia reafirma el posicionamiento de Chiloé como destino turístico internacional. “Debemos sentirnos muy orgullosos por el prestigio turístico que tiene Chiloé en el mundo, esto es sin duda, gracias a sus atractivos, pero también al compromiso y trabajo en conjunto entre el sector público y privado. La isla es conocida por la conservación de sus tradiciones y su cultura, por la arquitectura de sus Iglesias Patrimonio de la Humanidad y sus palafitos; además por su belleza escénica y su gente”, explicó.

“No es la primera vez que Chiloé aparece mencionado en un ranking de estas características. A inicios de diciembre la revista National Geographic Traveler recomendaba a la isla como uno de los diez destinos para visitar durante el invierno boreal 2016 (verano Hemisferio Sur), en donde destacaron atractivos como el avistamiento de pingüinos en Puñihuil, la gastronomía chilota y los mercados con artesanía en lana y tejidos”, sentenció la directora regional Sernatur.

La publicación

En este contexto, Travel + Leisure señala en el escrito de forma textual que, “el encanto de Chiloé es evidente: más de 30 islotes verdes con bosques nativos y una abundancia de vida silvestre que alguna vez fue mencionada en los estudios de Darwin”.

Y continua explicando el origen de su cultura e identidad de la siguiente forma, “el archipiélago fue colonizado por los jesuitas en el siglo XVII y sus islas permanecieron en relativo aislamiento de la parte continental Chile por más de 250 años, dando lugar a un híbrido cultural, entre el folclore indígena y las tradiciones hispanas. Las influencias mestizas se pueden ver en las capillas de madera protegidas por la UNESCO desde el año 2000”.

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